El verano eterno

Faltan dos días de calendario para que acabe el que recordaremos como el verano eterno. Hemos recorrido Europa y hemos vuelto a Africa, hemos tenido risas, amigos, familia, baños en el mar, trabajo nocturno y muchísima reflexión . En Pollensa, Danae Stratou expuso su « It is time to open the black boxes « de la mano de Ines Muñozcano. En Es Baluard de Palma, Marta Moriarty presentó « Africa, what Africa ? « ,prologando así el cuerpo de sus estudios sobre la identidad del continente y la actual situación y función del Arte contemporáneo en Africa, con textos propios y de Benji Liebmann, Lucy Mac Garry y Beathur Mgoza Baker . Septiembre empezó con la gloria de Marrakech, ciudad generosa que nos regala proyectos y entusiasmo. La temporada de Madrid se abre con la exposición de Mohamed Arejdal en MartaMoriarty y la visita de Ishola Akpo quien , a más de gran artista , ha resultado ser un alegre compañero.
Este de 2018 ha sido además un verano extraño e intenso con satisfacciones, decisiones, pérdidas y desgarros, un verano eterno que sin avisar quedará para nuestra privada historia como el verano que fue metáfora del gran juego maravilloso, terrible y secreto del universo.